
¿Qué es la disnea?
La disnea es descrita por los médicos como la dificultad del ser humano a la hora de respirar y cuya característica principal es la ” falta de aire” que al paso de los años se convierte en una sensación incómoda.
Esta falta de aire, en ocasiones puede ser registrada de forma leve y temporal y si no se atiende pudiera pasar a una situación grave y prolongada y que en muchos casos es difícil de diagnosticar y de tratar por cuanto existen muchas causas posibles que la hayan podido originar.
De igual modo, se puede reflejar con la obstrucción de los conductos nasales, de la boca o la garganta que conlleve a que se presenten dificultades respiratorias. De acuerdo al Centro de Educación Continua de la Clínica Cleveland 1, de cada cuatro personas que visitan al médico 1 padece de disnea, por cuanto los problemas de falta de aire, pueden resultar del excesivo esfuerzo en personas saludables.
Síntomas comunes

Entre los principales síntomas que deberían comenzar a preocuparnos ante la realidad de manifestarse la disnea, se encuentran : dificultad para respirar luego de hacer un esfuerzo o tras padecer alguna enfermedad sentir ciertos niveles de asfixia con sofocos, pecho oprimido, respiración muy veloz y superficial y palpitaciones del corazón o taquicardias
También puede presentar sonido silbante y de carácter chillón durante la respiración, cuando se desplaza por los conductos de los pulmones , presentan tos y si se presentan de forma constante suelen ser síntomas de una afección de carácter grave.
La disnea generalmente está asociada con problemas de salud y en algunos casos, puede ser el resultado de no estar en forma, por tanto el ejercicio puede mejorar la sintomatología o por el contrario, la disnea podría ser una evidente señal de una patología grave.
Las causas que comúnmente se conocen de la disnea son el asma y la insuficiencia cardíaca, el EPOC o enfermedad pulmonar obstructiva crónica, neumonía, problemas psicógenos ( trastornos físicos o mentales sin evidencia de una enfermedad orgánica en si) asociados a la ansiedad.
Control en casa
Cuando las personas conocen a fondo las causas de la disnea que presentan y sus dificultades para respirar y, al no tratarse de una emergencia médica,, fácilmente pueden ejercer el control de la enfermedad desde su casa de habitación. .
Es bueno destacar que, una persona puede tener episodios de disnea a pesar de que los niveles de oxígeno se encuentren dentro de los términos normales y, comprender además que, las personas no mueren como consecuencia de la disnea que puedan padecer.

Para mejorar la disnea y atenderla sin mayores preocupaciones en casa existen varios ejercicios y acciones que se pueden practicar y controlar relativamente con seguridad la situación:
-Respirar de forma profunda desde el abdomen, está entre las técnicas aplicables para ayudar a controlar la falta de aire, en la práctica en casa deben dejar llenar los pulmones de aire por un par de segundos y luego exhalar lentamente por la boca vaciando los pulmones y repitiendo la acción entre 5 y 10 minutos.
Practicar la respiración con los labios fruncidos ayudará a minimizar la falta de aire en los pulmones al bajar el ritmo de la respiración y esto es muy útil cuando la ansiedad es la que ha causado la falta de aire. Pudiendo este ejercicio repetir hasta que la persona se sienta mejor.
Usar un ventilador portátil para que le proporcione aire a la nariz , sentir la fuerza del aire mientras se inhala, resulta efectivo para la sensación de falta de aire
-La inhalación de vapores también ayuda a mantener los conductos nasales despejados y por tanto, se podrá respirar con mayor facilidad y efectividad tras despejar la mucosidad en los pulmones.
Se puede llenar un recipiente con agua y agregar unas cuantas gotitas de aceite de eucalipto o pimienta , luego colocar una toalla sobre la cabeza y aspirar los vapores que se desprenden al hervir el agua. Tomar e cuenta un breve reposo del agua al hervir, a fin de que se no irriten las vías respiratorias.
-La ingesta de café negro puede ayudar al tratamiento de la falta de aire, en virtud de que la cafeína tiende a reducir la fatiga en las vías respiratorias, sin embargo es de hacer notar que el consumo de cafeína puede incrementar el ritmo cardíaco de las personas en algunos casos.
-Consumir jengibre fresco o agregarle al agua caliente como un té, también ayuda a controlar las dificultades para respirar.
Cambiar el estilo de vida es también imprescindible a la hora de controlar la disnea, por tanto se aconseja perder peso si se presenta obesidad , evitar realizar ejercicios en un clima caluroso o altitudes elevadas y dejar de fumar o evitar ser un fumador pasivo.